Santa Cruz de Mompox es un destino mágico e histórico, se encuentra en el centro de Bolívar bordeado por el río Magdalena.
La también llamada “Tierra de Dios” envuelve un estela de romanticismo acompañada por la belleza arquitectónica de sus calles y plazas. Hace mérito de concentrar seis emblemáticas iglesias: Santo Domingo, San Juan de Dios, La Inmaculada Concepción, San francisco, Basílica del Santísimo Cristo Milagroso y Santa Bárbara, y dos auténticas capillas: la del cementerio y la Capilla de la Caridad del Santo Ecce Homo.
La historia de la Semana Santa momposina se remonta al siglo XVI con la llegada de las comunidades religiosas y la traducción en las 6 iglesias y 2 capillas.
Este año el afiche promocional de las festividades resalta dentro del simbolismo religioso a dos personajes importantes y protagónicos como lo es la Virgen María y su advocación de ella como Virgen de la Piedad, de las Angustias, Virgen de la Soledad o de la Dolorosa, y se aprecia conformando un triduo con San Juan y María Magdalena, ceremonia que se realiza en la Basílica, y se hace los tres días antes del Viernes de Dolores, de gran significado religioso; y el Nazareno, personaje importante desde el escenario donde le corresponda actuar, en las filas, carguero, cornetero, campanero o en el palio.
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La Virgen de los Dolores la vemos en la ceremonia del despedimiento, la madrugada del Viernes de Dolores; procesión del paso ‘robao’ que escenifica a Cristo con su cruz hacia el calvario, para luego aparecer la misma noche encontrándose en la Plaza de la Concepción e iniciar la sexta Viacrucis.
El Martes Santo, junto al Ecce Homo desfila la Virgen de las Angustias, hermosas imágenes, esplendorosas y con elegancia marchando al son de música fúnebre momposina interpretada por la Banda La Valerosa. Se hacen 7 estaciones conocido esto como el Vía Matris.
El Jueves Santo en la procesión de los 15 pasos que recrean de manera colorida y vistosa la vida, pasión y muerte de Jesucristo, resaltan la Virgen de la Dolorosa, siendo la encargada de cerrar la procesión, cargada en andas por niños que no sobrepasan los 14 años.
El Viernes Santo en Mompós llega antecedido por la Cruz, el santo sepulcro, los caballeros del Cristo y las damas de la Dolorosa, todos ellos vestidos de luto riguroso con un código de vestimenta estricto, que hace de ésta, una noche elegante y sobria.
(Semana Santa 2023 en Cartagena).
La Virgen de la Dolorosa, imagen que data del siglo XVIII, cierra esta procesión de nuevo y es la misma que protagoniza la triste procesión de la Soledad en la madrugada del sábado, regresando a la Basílica de San Agustín, su sitio de partida acompañada de las damas de la Dolorosa.
El Sábado de Gloria, a la hora malva desfila la procesión de la Virgen Dolorosa de los Clavos, nueva propuesta no incluida en la programación. Es una bella imagen. Y por último, como Virgen de la Alegría se acompaña de San Juan y la Magdalena en el Domingo de Resurrección.
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LA SANTA TRADICIÓN DE HIPÓLITO
El Nazareno, desde el paso robado, hace su aparición con su túnica azul, capirote, capa y borlas blancas, pero el día importante que llega al clímax su participación es el Jueves Santo, cuando por más de 67 años Hipólito Navarro acudió a las oraciones en las iglesias, y por 60 años emitió su corneta el sonido que anunciaba que murió Jesús, hombre ejemplar que Corposanta le rinde un merecido homenaje en el afiche.
Es necesario resaltar la Semana Sántica, organizada la semana anterior por el licenciado Jesús Abuabara. Es una réplica de los mayores, que hace predecir que la pasión, fe y la tradición vivirán para siempre con este relevo generacional.
JOYA COLONIAL
Mompós, hermosa joya colonial, con un centro histórico único, se muestra orgulloso de ser pueblo patrimonio y Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad. Se ofrece como un importante destino turístico con más de 40 atractivos ecológicos, religiosos, gastronómicos, culturales, entre otros.
Hay mucho por conocer y explorar, al igual que la biodiversidad de sus alrededores, como es útil resaltar la orfebrería que se traduce en sus joyas en filigranas en oro y plata, que salen de las manos ingeniosas de sus joyeros; al igual que las forjas de ventanas y puertas en herrería, mecedores y muebles de sus ebanistas, macetas y columnas de sus alfareros, los sabores y saber de sus ricuras gastronómicas, donde destacamos los quesos de capa, butifarra, casabitos, longaniza y muchas otras delicias.
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La Semana Santa será una magnifica excusa para disfrutar de esta bella población y ser acogido por su gente alegre, culta, servicial y hospitalaria en sus hoteles, hostales y casas de familia, que disponen sus habitaciones para hacer más acogedora y feliz la estadía.
Fuente:
El Universal y Abel Enrique Martínez Rapalino