Recorrido por los monumentos en Cartagena de Indias

Los monumentos son mi encanto personal, por ello decido terminar de recorrer el enorme museo al aire libre que es el Centro Histórico de Cartagena de Indias e impactarme con esos gigantes de bronce.

Monumento a Miguel de Cervantes Saavedra

Empiezo a un costado del Camellón de Los Mártires, diagonal al parque Centenario y con una vista privilegiada de la colosal Torre del Reloj, que por estos días se ve más espectacular de lo normal por las gotas de lluvias que bajan del chapitel. La plaza en la que estoy lleva por nombre el monumento que se encuentra aquí, la del ilustre Miguel de Cervantes Saavedra.

Él, sentado en su silla escribiendo alguna de las gloriosas páginas de sus magnificas obras, con un tintero en la mesa y las piernas cruzadas que denotan la elegancia con la que se inspiraba, fue construido e inaugurado en el año 2007 en honor a la visita de los reyes de España Juan Carlos I y Sofía de Borbón.

Monumento en homenaje los soldados de Corea

Decido apartar mi vista y seguir caminando en el asfalto custodiado por la muralla cartagenera y una descomunal vista de la Bahía de las Ánimas, la cual es una dicha para venir a ver el atardecer sentado en el muelle. Escasos metros después llego al parque de la Marina, donde, postrados en granito de piedra, están unos monumentos que honorifican a los soldados que combatieron en la guerra de Corea. Son cuatro en total, dos soldados, un barco y un ancla que complementan perfectamente la serenidad que se siente.

Aparte de respirar un aire diferente en este parque por ser uno de los pulmones de la ciudad, la gigantesca fuente, y el fresco que proviene del mar hace de este un jardín donde el tiempo se pierde con facilidad. Además, un picnic los fines de semana es de los mejores planes para los domingos, sentado y oculto en la sombre de alguna de las ramas de los árboles.

Monumento a San Pedro Claver

Luego de tomar un par de fotos en este monumento venerado, decido seguir con mi ruta. Al final de la calle San Juan de Dios me detengo en una de las esquinas de la parroquia San Pedro Claver, una de las iglesias más icónicas de La Heroica.

Entre palomas y turistas tomándose selfies observo el monumento en honor a San Pedro ayudando al esclavo Enrique Grau. Dos estatuas palpables, de dos metros aproximadamente, son uno de los atractivos que tiene esta plaza, rodeada de restaurantes, palenqueras sonrientes y música de artistas callejeros en vivo. Por supuesto yo también poso para guardar un recuerdo del “esclavo de los negros”, canonizado en 1888 por el papa Pío IX.

Monumento a Juan Pablo II

Doy unos cuantos pasos y estoy en la plaza de la Proclamación, al lado de este lugar está la Catedral Santa Catalina de Alejandría, otro símbolo parroquial de Cartagena de Indias. Aquí, entre la alegría de los cartageneros y las historias de los cocheros se encuentra el monumento a un ex sumo pontífice, Juan Pablo II. Inaugurado en el 2012, se hizo con el fin de siempre tener la figura del papa viajero en el Caribe colombiano, pues su visita en 1986 en esta ciudad quedó inmortalizada en los cartageneros.

Monumento de los Alcatraces

Unos alcatraces en vuelo colocados en un pedestal miran hacia lo más alto del cielo como si nunca más fueran a retornar de donde partieron. Este monumento se encuentra en la avenida Santander, diagonal a uno de los boquetillos que da entrada al Centro de la ciudad.

Con unas bancas para admirar su belleza, fue restaurado en el 2013 por el gobierno de turno y, según dicen los cartageneros, el escultor Eladio Gil Zambrano lo construyó por el poema Eduardo Lemaitre “los alcatraces”. Que mejor lugar para brindar un tributo a este poema que con la vista del descomunal mar y viendo como verdaderos alcatraces vuelan en picada para capturar su alimento.

Así termina este recorrido por estos importantes monumentos de Cartagena de Indias. No dejan de encantarme los secretos que ocultan y que complementan la historia de Cartagena de Indias.