Centro Histórico de Cartagena y sus esquinas fascinantes

Caminar por las calles del Centro Histórico de Cartagena de Indias (Lea aquí Calles de Cartagena de Indias con historias de terror) es un plan imperdible. Como turista lo mejor es detenerse en las esquinas; mirar a los alrededores, principalmente hacia arriba, para poder contemplar en toda su dimensión la arquitectura que se mantiene en pie pese a los años. Otro tipo de tour por hacer en Cartagena.

Existen construcciones monumentales, valiosísimas e importantes como la que ocupa el Banco de la República, la Escuela de Bellas Artes, la Universidad de Cartagena, la Alcaldía, la Seccional Bolívar del SENA y la antigua sede de la Gobernación de Bolívar que aprecian perfectamente desde las plazas donde están ubicadas. De esas estructuras fascinan hasta los mínimos detalles y lucen como en sus mejores tiempos con sus diseños bien conservados. Las fachadas, patios internos, salones, arcos, ventanales, escaleras, pisos, paredes altas y balcones, todo representa un gran valor en esta ciudad Patrimonio Cultural, Material e Inmaterial. Transitar por otras calles o plazas del Cordón Amurallado nos obliga también a detenernos ante otras llamativas construcciones no menos importantes.

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Al ubicarnos en la Calle de La Moneda, entre las calles Primera y Segunda de Badillo, y la San Agustín Chiquito es inevitable enfocar nuestra mirada hacia una encantadora casona colonial de tres pisos pintada de amarillo con balcones blancos. De día, el sol la ilumina y se encarga que todo el que atraviese por estas esquinas la aprecie de arriba abajo. De noche es aún más visible porque resalta con las luces. Está rodeada de locales comerciales. Este lugar es famoso por las ensaladas de frutas y dulces que venden las palenqueras y es una de las más transitadas por ser el paso obligado hacia la Universidad de Cartagena, y el Parque Fernández de Madrid. Si le damos la espalda y seguimos por la Calle Primera de Badillo y llegamos a la esquina, entre la Calle de Las Carretas y Calle del Tablón apreciamos la imponencia de la edificación azul con blanco que luce hermosa a toda hora. De día o de noche observarla es detenerse en el tiempo. Sus más de 30 balcones con barrotes de cemento y ventanales de madera engalanan los cinco pisos. Paso obligado para llegar a la Plaza de Los Coche o Torre del Reloj. En la esquina podemos hacer una parada para saborear por dos mil pesos un irresistible mango verde picado que agrada más con sal, pimienta y un toque de limón. Si llega a la Plaza de los Coches no se le olvide hacer una parada en el Portal de Los Dulces

Subiendo por la Calle de Las Carretas y doblando a la derecha por la Calle Portocarreño (antigua Calle del Esclavo) hasta llegar donde se encuentran estas dos calles con la del Colegio, nos topamos con un inmueble esquinero de tres pisos en cuya fachada rectangular aparece el nombre de una reconocida compañía cartagenera. Es amarillo, con balcones y arcos de medio punto de color blanco. Hoy, lo ocupan varios locales comerciales. A sus afueras podemos deleitar una refrescante y saludable agua de coco bien fría. Desde allí se llega a la Catedral Santa Catalina de Alejandría y a la Plaza de La Aduana. Para Finalizar, otra majestuosa casa del Centro Histórico de Cartagena de Indias se encuentra en la famosa y concurrida Plaza Santa Teresa, entre las calles San Juan de Dios y Ricaurte. Allí, dueña de una imponencia absoluta sobresale por sus vistosos ventanales y balcones repartidos en sus dos plantas. Es el punto obligado para la foto del recuerdo por formar parte de un hermoso panorama con el cordón amurallado, un hotel cinco estrellas el Museo Naval del Caribe, la iglesia San Pedro Claver y las artesanías que contrastan a la perfección. Sin duda alguna, en todas estas valiosas obras es posible tomarnos una fotografía para el recuerdo de nuestra visita en Cartagena de Indias.