Aunque anteriormente se asociaba el término con lugares de poca calidad, suciedad, fiesta y habitaciones repletas de literas, hoy en día se traduce en agradables y cómodos espacios donde los viajeros pueden encontrar una amplia variedad de servicios y precios que se acomodan a sus distintos presupuestos.
Actualmente existe toda una industria alrededor de los hostales y, según uno de los lugares de reservas más importante del sector, como lo es hostelworld, existen más de 33.000 propiedades registradas en más de 170 países. Gracias al incremento constante de la competencia, así como a la evolución de internet y el masivo uso de las distintas redes sociales, en las que personas de todo el mundo comparten sus impresiones y experiencias sobre los lugares que visitan y en los que se alojan, los negocios cada día trabajan por superarse unos a otros en una batalla en la que los usuarios se convierten en felices ganadores.
Para muchos viajeros los hostales se han convertido en la primera opción, y no son simplemente una solución para turistas austeros. La impresionante evolución en servicio e infraestructura hace que los sitios actuales borren de la mente esos estereotipos que se tenían de alojamientos del pasado para “mochileros”. Ambientación y decoración con las últimas tendencias de la moda, tecnología moderna, así como practicas eco amigables, entre muchas otras cualidades y comodidades, hacen parte de la tendencia actual de los hostales, por lo que más allá de tener una de las mejores relaciones calidad – precio del mercado, la gente los escoge por convicción y no sólo por necesidad.
Pero tal vez la razón principal por la que muchos prefieren estos lugares y regresan a ellos, es por la divertida oportunidad de conocer gente nueva y hacer amigos de distintas nacionalidades . Lo mejor, todo esto es posible hacerlo en un lugar plácido, seguro y con todo lo necesario para sentirse cómodo. Cartagena tiene una amplia carta con muy buenas opciones para relajarse, divertirse y hacer nuevos amigos en los sectores más encantadores de esta ciudad mágica. Explore sus opciones y déjese sorprender.
Estos son los 10 mitos que debe eliminar sobre los hostales. Recuerde que no necesariamente estos sitios son para usted, pero no tenga dudas que tienen todo para intentar seducirlo.
1. Los hostales son lugares sucios
Nada más falso. Los hostales son lugares muy limpios y organizados que mantienen siempre altos estándares de calidad. Para el negocio es muy importante conservar un ambiente pulcro, ya que de esta manera podrá obtener las mejores opiniones y recomendaciones de los viajeros.
2. Los hostales son lugares sólo para fiesteros
Aunque es perfectamente posible que personas amantes de las fiestas y la vida nocturna se hospeden en los hostales, es muy probable que también lo hagan en hoteles. Al contrario de lo que se puede pensar, los hostales tienen unas políticas muy estrictas sobre el consumo de licor y el exceso de ruido en las áreas comunes. Manejan espacios y horarios destinados específicamente para que estas actividades se desarrollen sin interferir con el descanso de los otros huéspedes.
3. Los hostales no son sitios seguros
En realidad, los hostales son lugares muy seguros, en especial por la regla no escrita que existe entre los usuarios de este tipo de lugares a nivel mundial: el voto de confianza, que funciona como la mejor garantía de seguridad. Pero además de la buena fe que impera en estos espacios, la mayoría de ellos están equipados con todo lo necesario para ofrecer una seguridad más que apropiada, empezando por un personal del hotel atento durante todo el día y toda la noche, cámaras de seguridad, circuito cerrado, cerraduras electrónicas para acceder a las habitaciones, cajas fuertes para guardar objetos de valor, entre muchos otros elementos que le permitirán descansar y explorar sin preocuparse por extraviar sus pertenencias.
4. Los hostales no tienen privacidad
Hoy en día los hostales ofrecen en su portafolio de servicios habitaciones privadas con baño interno que rivalizan, tanto en diseño como en confort, con las de algunos de los mejores hoteles. Incluso el espacio de las habitaciones grupales ha sido optimizado, por lo que cada cama es independiente y no se interfiere con el descanso de los demás.
Por supuesto que estas habitaciones tienen un costo mayor al de las tradicionales. En promedio, una cama en una habitación compartida tiene un valor de $70.000 COP, mientras que una suite privada puede llegar a costar aproximadamente $350.000 COP.
5. Los hostales son simples
La dureza de un mercado cada vez más competitivo, ha obligado a los dueños de los hostales a ir mucho más allá de simplemente ofrecer un colchón y un desayuno. Los desafíos conceptuales y comerciales de este gremio, en el que cada vez se tiene mayor relación con las opiniones y percepciones de los clientes, hacen que cada día las exigencias sean más grandes y los negocios deban buscar una identidad propia que los separe del resto. Los hostales pueden ser todo, menos simples.
6. Los hostales son sólo para jóvenes y mochileros
La diversidad es uno de los elementos propios de un hostal. Mediante un esfuerzo conjunto de viajeros e industria, se ha creado una comunidad alrededor del mundo que disfruta de aventurarse en sitios nuevos y conocer personas y culturas diferentes. Este es parte del encanto de un hostal, y lo mejor de todo es que no hay restricciones de edad o de ningún otro tipo para disfrutarlo. Desde personas que se arriesgan por primera vez a conocer un nuevo país, hasta viajeros experimentados que llevan años recorriendo el planeta, los hostales son un buen punto de partida para cualquier aventura y un buen refugio para descansar de ellas.
7. Los hostales son sólo para las personas que no pueden pagar un hotel
Si bien una suite en un hotel de 5 estrellas o más puede duplicar el valor de la habitación más cara de un hostal, muchas personas eligen la atmósfera única de éstos, no necesariamente por un precio específico o una cifra de dinero que se puedan ahorrar, sino precisamente por el ambiente multicultural que se respira en las áreas comunes de estos lugares. Actualmente puede haber precios similares para una habitación en un hotel promedio y una en un hostal. Sin embargo, la gente se decide cada vez más por el valor agregado que encuentran con diseños y actividades especiales en los hostales, comparado con el servicio estándar y básico que reciben en un hotel.
8. Los hostales no tienen comodidades
Aunque esto varía entre los diferentes negocios, cada vez más los hostales se preocupan por ofrecer a sus clientes un mayor valor agregado. Desde Wi-Fi gratis y cocinas bien equipadas, hasta piscinas, jacuzzi y divertidas salas de entretenimiento, la búsqueda por la satisfacción del cliente está garantizada. Aunque algunos hostales lo hacen a través de agencias aliadas, otros han ampliado su campo de acción y, en la actualidad, ofrecen a sus huéspedes restaurantes espectaculares y bares temáticos, así como espacios para meditar y cómodos spas.
9. Los hostales son todos iguales
Quizás en filosofía o espíritu. Es decir, cualquier hostal se debe caracterizar por su pasión hacia los viajes y los viajeros y por la oportunidad de conocer e interactuar con diversas culturas, pero hasta ese punto llegan las similitudes. A partir de allí, cada negocio posee inspiraciones y objetivos diferentes. Cualquiera sea el enfoque, cada hostal es distinto y en cada uno podrá vivir experiencias singulares e inolvidables.
10. Los hostales son sólo para solteros
Precisamente la existencia de habitaciones privadas demuestra lo contrario. ¿Quién ha dicho que por estar en una relación no puede salir a conocer el mundo y divertirse? Es más, seguramente más de una relación habrá nacido en un área común de algún hostal, por lo que a diferencia de algunos hoteles, un hostal justamente invita a compartir con personas de cualquier género de manera abierta y espontánea.
Soltero, en pareja, o con un grupo de amigos, los hostales siempre serán una buena opción para viajar y conocer una nueva cultura. Mientras cultiva sus habilidades sociales y se convierte en el mejor embajador de su país, podrá también pasar unas de las mejores vacaciones y aventuras de su vida.